Si Granados fijó su mirada hacia Alemania (y hacia Wagner particularmente) para renovar el repertorio español, Albéniz se enfocará en la música francesa, tanto así que terminará por transformarse en uno de los estandartes de la escuela impresionista, no solo como compositor —a través de suites como Iberia o les chants d´espagne—sino que también influye desde la docencia, siendo miembro fundador de la Schola Cantorum y ejerciendo como maestro de otro gran compositor impresionista; Déodat de Séverac.
La materialidad en el arte moderno
Cuando la pintura impresionista solo sigue preocupada por la materialidad en sí de la luz y repite sus hallazgos estéticos como mero patrón de belleza, ya consagrada socialmente, es que ha quedado estancada irremisiblemente en su propia institucionalización.